Varias productoras advierten que el nuevo Plan Gas que anunció el gobierno establece criterios para acceder al mercado de exportación del fluido que, en la práctica, terminarán favoreciendo de manera exagerada a YPF. En lugar de que la venta de gas a Chile funcione como una palanca para elevar la competencia entre las petroleras a fin de lograr un mejor precio del gas para el mercado local, tal como sucedió en la primera edición del Plan Gas.Ar, esta versión parece asegurar ese negocio para los mayores jugadores de Neuquén. Otras petroleras pidieron a la Secretaría de Energía que se corrija la letra chica del programa para evitar un monopolio de la venta de gas al exterior.
Desde la óptica de las petroleras, el nuevo Plan Gas 5 que anunciaron este jueves en la Casa Rosada el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa, ofrece dos atractivos centrales. Uno primario y más evidente, que está dado por la posibilidad de contractualizar la venta del gas que producen en el mercado interno hasta diciembre de 2028. Eso les otorga un horizonte de mediano plazo para planificar el desarrollo de sus yacimientos. La segunda zanahoria es menos explícita, pero no menos importante y se apoya sobre la chance de poder exportar parte de la producción de gas al mercado chileno durante el período de verano que se extiende entre octubre y abril.
La licitación que realizará el gobierno en las próximas semanas definirá, de manera simultánea, no sólo el precio que recibirá cada productor por el gas que inyecte en el mercado local, sino también cuánto podrá exportar hacia el otro lado de la Cordillera y a qué precio. Aunque la exportación hacia Chile mueve un volumen de gas mucho más chico que el que se comercializa en el mercado argentino, para los privados termina siendo igual o más atractivo que el segundo.
¿Por qué? Fundamentalmente, porque permite aplanar la curva de producción de los yacimientos. El mercado argentino tiene una característica particular: posee un swing muy pronunciado entre invierno y verano, por lo que en julio se consume un 30% o 40% más de gas que en diciembre. Frente a eso, los productores corren el riesgo de tener que bajar producción durante los meses de calor si no encuentran puntos de venta del otro lado de la cordillera. Verse obligado a cerrar pozos es el peor escenario para una petrolera porque destruye el valor del negocio. El mercado de exportación chileno es, por eso, el verdadero negocio por el que compiten las empresas productoras. Su objetivo de máxima es asegurarse una cuota de ese mercado.
Ventaja para uno
El problema que advierten la gran mayoría de los productores es que tal como quedó redactado el borrador que el gobierno circuló entre los privados, el marco regulatorio del nuevo Plan Gas establece una serie de criterios para definir qué empresas tendrán prioridad para exportar que favorecerá de forma en forma exagerada a YPF, la petrolera controlada por el Estado, tal como adelantó este medio, y en menor medida a Tecpetrol, el otro gran productor de la cuenca Neuquina. No es extraño que un plan de estímulo diseñado por el Estado beneficie a la petrolera controlada por el propio gobierno, pero en este caso distintas fuentes privadas sin contacto entre sí coincidieron en que las ventajas para YPF son excesivas.
¿Por qué esta versión del Plan Gas difiere de la anterior que se licitó en enero de 2021 también durante el gobierno de Fernández? Porque en esa primera versión, el programa utilizó el mercado de exportación como palanca para forzar una mayor competencia entre las petroleras a fin de lograr una baja del precio interno del gas. En este edición, en cambio, el riesgo es que, como el programa parece asegurar el negocio de exportación a Chile para los grandes productores, no haya incentivo para lograr un mejor precio del gas en el mercado doméstico.
La extensión de los contratos vigentes del Plan Gas.Ar y el lanzamiento del Plan Gas 5, que en los hechos apunta a conseguir el gas para llenar el gasoducto Néstor Kirchner, incorpora una nueva metodología de asignación de cupos de exportación en firme para el período estival. La normativa que se publicará en los próximos días en el Boletín Oficial aplicará para tres cuencas productivas —la Neuquina, la Austral y la del Noroeste— y establece que los permisos se adjudicarán conforme a cuatro criterios particulares:
-Por un lado, un 30% del cupo se repartirá en función del volumen de gas que se adjudique a una empresa en cada cuenca. La participación de YPF en Neuquén es siete veces más grande que la del promedio del resto de los productores, por lo que la empresa que preside Pablo González podría quedarse íntegramente con ese renglón.
Desigual
-A su vez, otro 30% del cupo de exportación se asignará entre quienes generaron un ahorro fiscal en cada cuenca. ¿Cómo se determinará ese ahorro? Se considerará la diferencia entre los precios adjudicados en los contratos vigentes del Plan Gas.Ar y el precio de las rondas 4.1 o 5.1, según corresponda, multiplicada por los volúmenes de cada productor.
“Este ítem contempla, en definitiva, multiplicar el volumen originalmente ofrecido en el Plan Gas. Ar por la eventual reducción de precio que ofrezca cada productor. Como YPF tiene una producción que es siete veces más grande que el promedio del resto de los productores y al mismo tiempo, el precio que ofreció en las primeras rondas es un 12% más alto que la media (porque la petrolera ofreció un precio de US$ 3,67 por millón de BTU por lo que quedó última en el orden de despacho), YPF cuenta con una ventaja evidente para desplazar a sus competidores”, analizaron en una petrolera. “Para que quede claro, para competir en este criterio, una empresa debería bajar al menos siete veces el precio que baje YPF”, agregaron.
En función de lo especificado de estos dos primeros criterios, YPF correría con una amplia ventaja para quedarse con el 60% del cupo de exportación. ç
“¿Cuál sería entonces el incentivo para el resto de los productores de ofertar un precio competitivo si no hay chances reales de ganar?”, indagó el gerente comercial de una productora.
Criterios
El tercer criterio definido por la Secretaría de Energía para regular el mercado de exportación de gas establece que “otro 30% del cupo se distribuirá entre quienes generen un ahorro fiscal en la cuenca en el marco de la participación en las Rondas 4.2 o 5.2 o sucesivas de volúmenes incrementales, según corresponda”. Se considerará, en este caso, la diferencia entre el precio tope de la Ronda 4.2 o 5.2 y el precio de los volúmenes ofertados en esas rondas de volúmenes incrementales, multiplicada por los volúmenes adjudicados para la ventana mayo-septiembre.
“En este último punto sí existirá una competencia real entre los productores, incluyendo a YPF. El problema es anterior porque YPF llegará a esa instancia con un bloque de exportación asegurado”, explicaron en una empresa que produce gas desde Vaca Muerta. “Debería aplicarse algún tipo de tope para que un productor no pueda monopolizar toda la exportación, porque así como está redactado YPF podría quedarse fácilmente con un 60% o 70% del negocio”, agregaron.
Fuente: https://econojournal.com.ar/